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miércoles, 29 de junio de 2011

El sol sobre la computadora , de Irma Verolín

María estaba sentada, como de costumbre, sobre el sillón de su dormitorio cuando la luz del sol entró por la ventana e iluminó la computadora. Fue tan extraño. La luz del sol siempre había entrado así en aquel momento de la tarde y la computadora también había estado en ese sitio; sin embargo algo había empezado a suceder que ella no alcanzaba a comprender.
De un salto, María se acercó a la mesa donde estaba apoyada la computadora y tocó el teclado. Pasó sus dedos por la pantalla suavemente. Presionó el botón y la encendió. Vio desfilar los archivos con sus ágiles letras luminosas hasta que, sin entender muy bien cómo, supo que la memoria de su computadora iba mucho más allá, que se extendía igual que un reptil hacia sitios perdidos. Adentro de la memoria de su computadora estaba encerrado el tiempo.
Con cuidado, María volvió a tocar las teclas y la pantalla se eclipsó, se puso blanca. Entonces el tiempo se fugó de su escondite. María sintió un escalofrío: el tiempo vibró. De pronto la computadora dio un brinco o eso le pareció a ella, porque de un momento a otro la computadora ya no era una computadora sino un tren listo para comenzar su viaje, un poderoso tren de hace cien años o, mejor dicho, una locomotora que pudo llenar de humo la habitación. Y al instante la locomotora ya no fue locomotora sino un barco con una vela blanca capaz de henchirse en el viento. Pero enseguida, como si el viento lo hiciera desaparecer, el barco fue una canoa y luego una imprenta rústica, de metal, y luego un molino que podía servir para moler muchas clases de granos.
María no pudo despegar su mano de lo que había sido en principio su computadora. Se quedó paralizada viendo la veloz transformación. Ella no pensaba en nada, viajaba simplemente sin que su cuerpo abandonara la habitación. Ahora ya no había molino sino un yunque de herrero, muy útil para fabricar armas o utensilios de comida.
María, ya casi sin sorpresa, vio al yunque convertirse en una cuchara, una tosca y arcaica cuchara de madera, y a la cuchara convertirse en vasija de barro y a la vasija, en garrote. Y el garrote se hizo árbol. Un árbol espléndido, fuerte y generoso. Inesperadamente la voz de su mamá la trajo de golpe hacia un tiempo en el que ella era María en su habitación y el sol entraba por la ventana y blanqueaba la pantalla de su computadora, que ahora se encontraba otra vez allá, firme y pulcra sobre la mesa.
-¡María- gritó su mamá- a comer!
Sí, la computadora era solamente y nada más que una simple computadora. Después María miró la fecha en el diario y el almanaque. Dio un suspiro y se tranquilizó: faltaban poquitos meses para que comenzara el 2001. Fue hasta la cocina. En la cocina vio el mantel con los platos y en el centro la frutera. Y en la frutera descubrió una manzana. Era una manzana roja, brillante. María pensó en el árbol del paraíso y le dio el primer mordisco.
* En www.elretablodelasmaravillas.com

jueves, 16 de junio de 2011

Hoy. Elsa Bornneman



La vida es breve.
Un parpadeo fugaz,
destello leve.

¿La vida? Un flash...
Todo tiempo se bebe
y es muy voraz.

Pasos ligeros:
nosotros, su menú,
sus pasajeros.

Ah... Te propongo
que –entonces– tú y yo,
sin un rezongo,

HOY nos amemos
–de la nada herederos–
mientras estemos.

* En Casa de La Pampa, Bs As con hija china y Caramelos sueltos.


domingo, 12 de junio de 2011

Al divino botón. María Elena Walsh


Esta canción, con perdón,
quiere ser una canción
que no sirva para nada.
No persigue el ideal
de ganar un festival
y no tiene intención
de hacer la revolución.
Quiere ser nada más que una canción
al divino botón.

Esta canción es, tal vez,
una cáscara de nuez,
un borrón de mala muerte
como la del señor
que mataron por error
o la de esa mujer
que mataron sin querer,
que mataron en más de una ocasión
al divino botón.

Esta canción, menos mal,
pronto llegará al final
como una bala perdida.
Corransé, por favor,
la señora y el señor,
no se dejen matar,
les previene un militar,
porque así pierde imagen la Nación
al divino botón.

Esta canción, por temor,
ni siquiera es una flor
para aquellos que un mal día
no se mueren de amor
ni en el campo del honor,
los fusila el azar
cuando van a trabajar.
Para qué, para quién, por qué razón:
al divino botón.

lunes, 6 de junio de 2011

¡Felicitaciones, chicos!


GANADORES DEL CONCURSO DE CUENTOS CORTOS SOBRE MEDIO AMBIENTE

La Subsecretaría de Ecología comunica los ganadores del concurso de "Cuentos Cortos sobre Medio Ambiente", que fue organizado en forma conjunta por la Subsecretaría de Coordinación del Ministerio de Cultura y Educación y la Subsecretaría de Ecología. Participaron más de 70 alumnos de escuelas primarias y secundarias de la Provincia, y la temática estuvo referida a problemas ambientales. Las categorías contempladas incluían cuentos infantiles y cuentos de jóvenes y adolescentes. El jurado estuvo integrado por el Lic. Miguel Fantini y la Lic. Virginia Saravia, por Ecología y el Prof. Norberto Sánchez y la Prof. Adriana Maggio por Coordinación. Por unanimidad el jurado selecciona en la categoría "Cuentos Infantiles": Primer Premio, la obra "Viaje al Futuro de La Pampa" seudónimo Flor, correspondiente a Macarena Santolaria del Colegio Santo Tomás de Santa Rosa. Segundo Premio: "El recorrido de los ciervos", seudónimo Pedro, correspondiente a Emmanuel Domínguez de la Escuela N° 2 de Santa Rosa. Mención: "La idea de Juan" seudónimo Nina, correspondiente a Vanesa Denise Giménez, de la Escuela N°74 de Santa Rosa. Los ganadores de la Categoría "Cuentos de Jóvenes y Adolescentes" son: Primer Premio: "En busca de mis sueños", seudónimo El Rayo, correspondiente a Fiama Fernández, del Instituto Aerotécnico de Alpachiri. Segundo Premio: "¿Cómo Sucedió?", seudónimo Cachito, correspondiente a Jessica Smidt de la Escuela Provincial Técnica N° 2 de General Pico. Tercer Premio: "El regreso del caos", seudónimo Fire Fénix, correspondiente a Tomás Arnauti, del Colegio Juan Ricardo Nervi de Santa Rosa. Los ganadores del primer premio recibirán una cámara fotográfica digital, en tanto que los ganadores del segundo y tercer premio, recibirán un mp4. En todos los casos los alumnos serán acreedores de un diploma de honor y publicación compartida de la obra. El acto de entrega de premios y menciones, se realizará el lunes 6 de junio en la sede de la Subsecretaría de Coordinación, a la hora 10:00.

jueves, 2 de junio de 2011

Pregunta un preguntón

–Son hojitas

de menta
y de cedrón,
que cada
mañanita
se asoman
al balcón
del mes
de enero,
para escuchar
el canto
de un jilguero
que estudia
su lección.

¡Así son
las hojitas
de menta
y de cedrón!

* Maria Hortensia Lacau. Argentina